
Hace unos días fue el Día de la Soberanía Nacional. Ese día, 20 de noviembre de 1845, en la Vuelta de Obligado, se requirió la máxima responsabilidad por una decisión soberana que los argentinos habían tomado en base a su libertad. Exactamente 179 años después, hemos tomado otra decisión soberana como pueblo, otra vez elegimos la libertad, pero el precio de la libertad es la eterna vigilancia. Ya hay signos de los avasalladores de siempre que no les importa nuestro voto y voluntad, cargarán contra nosotros en su beneficio. Quieren mantener sus privilegios en base a nuestros derechos, manteniéndonos en la miseria.